LA ORDEN MILITAR DE SANTIAGO DURANTE LA RECONQUISTA

 

                         A ORDEN MILITAR DE SANTIAGO

León año 1.171  Durante el reinado de Fernando II la Congregación de freires de Cáceres se convierte en la Orden Militar de Santiago, con estatutos propios, siendo su primordial objetivo la protección a los ataques musulmanes a los cristianos,  peregrinos que realizan el camino de Santiago de Compostela,

Además se proponen defender las poblaciones fronterizas de Extremadura  que sufren las constantes incursiones musulmanas, Por ello en principio se llaman <<Caballeros de Cáceres>> o <<Congregación de Freires de Cáceres>>.

Un año después de su constitución se convierte en una Orden Militar tomando el nombre de Santiago. Desde su creación la orden recibe numerosas donaciones de bienes y tierras de manera que pronto forma una especie de diócesis que incluye poblaciones de Toledo, Cuenca y Ciudad Real, con capital en Uclés.

Sus posesiones y su poderío se amplían constantemente hasta llegar a formar un gran maestrazgo como las restantes órdenes militares, Calatrava, Alcántara, Temple y del Hospital de San Juan de Jerusalén.

La Orden de Santiago se rige por un consejo, cuya presidencia o maestrazgo es ostentada primero Pedro Fernández de Fuentecalada, siendo uno de los principales promotores de su creación. A este le sucede Fernando Díaz, que muere en la batalla de Alarcos (1195),

También perece en el campo de batalla otro gran maestre llamado Sancho Fernández de Lemos, que cae en la contienda de Las Navas de Tolosa (1212). Cuando las órdenes militares se hacen muy poderosas, los reyes castellanos tratan de que sus grandes maestres pertenezcan a la familia Real. Efectivamente suelen colocar en ese influyente puesto a sus hijos bastardos.

Mezcla de monjes y caballeros, la Orden de Santiago se rige por la regla de San Agustín, pero se mantiene al margen de la jerarquía eclesiástica.

Los miembros de la orden de Santiago apoyan decisivamente a Fernando III en sus campañas contra los musulmanes. Y son los primeros en entrar en Sevilla donde colocan su estandarte bendecido por el Papa.

En su maestrazgo la orden de Santiago actúa como cualquier señor feudal, es decir ejerce poder directo sobre los vasallos de sus dominios.

La ampliación de sus señoríos es favorecida tanto por los privilegios concedidos por los reyes como por la propia dinámica de la repoblación de las tierras reconquistadas a los musulmanes.

Cuando finaliza la reconquista la Orden de Santiago se burocratiza y se dedica fundamentalmente a la administración de sus señoríos. Con el objetivo  de recortar su poder, los Reyes Católicos emprenden la tarea de incorporar los dominios al poder real.