VICTORIA DIPLOMÁTICA DE FERNANDO

 

Barcelona, 19 de febrero de 1493.- Fernando II de Aragón ratifica el Tratado de Narbona, firmado once días antes con Carlos VIII rey de Francia, mientras este lo hace en Tours

Desde 1491 Carlos VIII desea intervenir en Italia, en respuesta a las peticiones de ayuda que lee hacen los barones descontentos con Nápoles. Para ello ofrece la devolución de los condados del Rosellón y la Cerdaña a cambio de que el rey de Aragón abandone la causa de Nápoles, pieza imprescindible en la lucha contra el turco y clave de la precaria estabilidad entre los estados italianos.

Se inician las negociaciones secretas entre uno y otro lado pese a la oposición francesa de Ana de Beaujeu y su marido Pedro de Borbón a la empresa de Italia y  la amenaza de Fernando de invadir el Rosellón si las negociaciones fracasan.

En el verano de 1492 se firma un acuerdo preliminar en Figueres qu pone fin a las hostilidades entre Francia y l Corona de Aragón. Carlos VIII acepta un arbitraje para la devolución de los condados.

Carlos VIII firma el tratado de Narbona (8-1-1493), del que consigue excluir el asunto de Nápoles. Por él el monarca francés restituye los condados del Rosellón y la Cerdeña a Fernando II de Aragón, se suspenden los acuerdos matrimoniales de los hijos de los monarcas españoles hasta que Francia los acepte y se renuevan las antiguas alianzas.

Al mismo tiempo por el tratado de Senlis 23-5-1493 Carlos VIII renuncia al Artois y el Franco Condado en favor  de la Casa de Borgoña, por el de Etaples (3-11-1492), ya había conseguido la neutralidad inglesa, al prometer a Enrique VIII 745.000 escudos de oro, después de que Ludovico el Moro señor del Milanesado, le renueva un antiguo tratado de cooperación, el monarca francés penetra en Italia en Octubre de 1494.

Carlos VIII, a pesar de la protestas de Fernando II (1-1-1495) después de aliarse y posteriormente expulsar a Pedro II de Medici de Florencia, y de obtener la sumisión y del papa Alejandro VI Borgia , invade Nápoles y se apodera del reino (22.2-1495), Sin embargo Fernando el Católico envía ayuda a Fernando I de Nápoles,

Las tropas aragonesas dirigidas por Gonzalo Fernández de Córdoba, vencen totalmente a los franceses y les hacen abandonar Nápoles. (1497).