GRUPO DE SENDERISMO RAILES CERCANÍAS
DESPLAZAMIENTO A CERRO MURIANO EN EL BUS DE LAS 7,45 H. UNA VEZ LLEGADOS A ESTA POBLACIÓN, TRASBORDAMOS AL MICROBUS DESTINO VILLAHARTA QUE NOS DEJARÍA CERCA DEL LUGAR LLAMADO EL VACAR-,AQUÍ DESAYUNAMOS EN EL MESON CASA DE LAURA - LUEGO REANUDAMOS NUESTRO CAMINO HACIENDO KILÓMETROS Y HORAS PARA IR A COMER AL RESTAURANTE SANTA ELISA DE VILLAHARTA
SENDERISTAS.-Miguel Rodríguez Martín, Joaquín Sánchez Centella, Francisco Sáez Murillo, Juan Vargas González, Rafael Jiménez González, Antonio Corpas González, José Obregón Rojano Ángel Luis Rodríguez García, Félix García Carrasco, Manuel Borrego Centella, Aurelio Martínez Navarro y Pedro Luque Jimenez que subió en el bus de línea.
A la
finalización del desayuno nos salimos a la calle y una vez reagrupados vinimos a
dar comienzo la marcha andariega a través del Sendero GR-48 que viene a ser coincidente
con el Camino Mozárabe de Santiago y la Cañada Real Soriana.
Pronto
nos aparecería a lado izquierdo de
nuestra marcha la silueta del Cerro donde se encuentra el Castillo
de época Almohade de ÁLVACAR, de éste ya solo quedan los cuatro grandes paredones y por supuesto su larga historia.
Las continuas subidas y bajadas se fueron sucediendo una tras otra, hay una de ellas muy famosa que recibe el nombre de Cuesta de La Matanza, lo que no sabíamos cuáles fueron las causas y motivos de tan popular apodo, al parecer se debían a los muchos accidentes ocurridos en aquella carretera, donde el radio de las curvas era bastante reducido, exigiendo escasa velocidad de los vehículos para poder inscribirse con seguridad en ellas; con el paso de los años fue construida una variante y como dice el refrán, muerto el perro se acabó la rabia.
Sobre la marcha nos desviamos hacia el lugar donde se encuentra la Fuente de aguas ferruginosas llamada del Cordel, más de uno probó aquellas aguas y la verdad que, no eran de buen sabor y agradable al gusto del paladar, por aquellos lugares hay bastantes más fuentes y acuíferos de estas clase, vayan de ejemplo la fuente de Los Malos Pasos y la Boca del Infierno, un Balneario y alguna que otra fuente más que ahora no recuerdo su nombre.
Proseguimos
avanzando cuando ya teníamos a tiro de onda el lugar de nuestro destino, donde a las
12,15 horas hicimos acto de presencia, nos acomodamos a nuestro gusto siendo el
Restaurante llamado Santa Elisa.
Allí fuimos
para celebrar la anual y preceptiva comida de la Feria de Córdoba, al menos alejados de los molestos ruidos y ruidazos, así como de los vociferantes altavoces y de la numerosa presencia del gentío humano.
Este es un lugar apacible y tranquilo en plena sierra donde se come el mejor lechón o cochifrito toda la comarca.
Una vez finalizada la comida se abonó el importe y nos salimos a la calle para ir en busca del Restaurante llamado El Cruce donde se tomó EL CAFÉ, quedando a la espera del Bus que nos llevaría a Córdoba..
¡¡¡HASTA OTRA OCASIÓN ¡!!
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