CALZADAS Y PUENTES ROMANOS DEL ALTO GUADALQUIVIR
La extensa
red viaria romana llegó a alcanzar hasta 100.000 kilómetros construidos en todo
el Imperio. Gran parte de las calzadas se extendieron por el territorio de la Península
Ibérica, donde se han llegado a catalogar más de 300 vías romanas.
Las calzadas
se construían para el ejército extendiéndose muchas de ellas más allá de la
frontera romana. La construcción de las calzadas y la sustitución de los viejos
senderos que mejoró las comunicaciones dentro del Imperio, tanto para el ejército
como para la administración y con el paso del tiempo también para el comercio y
la población en general.
La
técnica empleada en la construcción de una calzada dependía de la categoría de
la vía y de la naturaleza del terreno en que se asentaba, existiendo una gran
variedad de vías por dimensiones y composición. Desde la rudimentaria calzada
de alta montaña simplemente tallada sobre la roca a las amplias calzadas de
entrada a las grandes ciudades.
En la
construcción de un tramo de calzada lo primero que se hacía era determinar la rectitud
de su trazado. De ello se encargaba el
agrimensor mediante el empleo de la GROMA (instrumento utilizado por los
antiguos romanos para trazar líneas perpendiculares y nivelar terrenos,
esencialmente para la construcción de carreteras).
La groma
se clavaba en el suelo, ésta tenía dos brazos cruzados y nivelados por unas
pesas, mirando a través de ellos y tomando como referencia el jalón que portaba
un ayudante situado frente a él podía marcar el camino a seguir por los
obreros.
- La
profundidad de la cimentación podía alcanzar un 1,5 m. aprox.
- El
relleno era de piedras grandes mezcladas con tierra suelta o arena llamada
statumen.
-Las
capas eran apisonadas con mazos de hierro.
- Capas
de grava.
- Losas
de caliza.
-Zanjas
para recoger el agua de lluvia.
-
Miliarios para marcar las distancias empleadas, separados entre ellos a una distancia
de 1.481,75 metros.
TIPOLOGÍA SEGÚN SUS MATERIALES
Vías
Públicas.- Financiadas con el aerariun o presupuesto del Estado. Constituían la
red principal de calzadas y esqueleto vertebrador de todo el Imperio. Como
ejemplo de ello tenemos la Vía Augusta que cruzaba la Península desde los
Pirineos hasta Cádiz.
Las Vías
militares eran calzadas inicialmente costeadas
mediante el presupuesto del ejército por su valor estratégico, si bien
con el tiempo se convirtieron en calzadas públicas.
De menos
importancia aunque las más abundantes eran los “actus” caminos de ámbito regional
en cuya financiación participaban las poblaciones directamente beneficiadas por
la obra.
Por último
las vías privadas siendo aquellas calzadas construidas y mantenida por los
terratenientes en el interior de sus posesiones agrarias.
GRANDES
VIAS QUE ATRAVIESAN LA MANCOMUNIDAD DE CÓRDOBA
Adamuz,
Algallarin, Montoro, Villafranca de Córdoba, Pedro Abad, Villa del Rio, El
Carpio, Morente, Bujalance, Cañete de las Torres.
Denominación
Vía Augusta, Vía Heraclea, Vía Epora-Solía
LA VÍA
AUGUSTA
En el
siglo I a.C. la Vía Augusta era la principal ruta terrestre de la comunidad
andaluza. Discurría de Este a Oeste, por la margen izquierda del río Baetis,
desde el Arco de Jano en el alto Guadalquivir hasta Gades. Su fisionomía
definitiva surgió del largo proceso de organización territorial realizado por los
romanos entre los siglos III y I a.C.
La Vía
Augusta unía los Cuatro Conventos jurídicos que formaban la provincia de Gades
(Cádiz), Híspalis (Sevilla), Astigis (Écija), Corduba (Córdoba), y comunicaba
la Bética con Roma pasando por la Tarraconense y la Narbonense. La Vía Augusta
alcanzó en el siglo I después de nuestra era todo el valor simbólico que Roma quiso
hacer patente en todas sus provincias.
El
adjetivo “augusto” significaba garantía de seguridad, prosperidad y riqueza,
por lo tanto, el nombre de Vía Augusta significaba excelencia sobre las demás vías,
así como la magnificencia y el poder del Imperio.
La Vía
entra en Córdoba a través del puente de Villa del Río, llegando a Epora (Montoro)
por el camino de los Almendros. La calzada continúa hacía Sacili Martialialum
situado en el Cortijo de Alcurrucen en
las proximidades de Pedro Abad y por último cruzaba el río Guadalquivir hacía la margen derecha en Villafranca de Córdoba.
LA VÍA
HERACLEA O HERCÚLEA
Recorría el
tramo entre Cástulo (Linares) y Córdoba pasando por Iliturgis (Andújar), Obulco
(Porcuna), Calpurniana (Bujalance) y según se iba acercando a Córdoba, cruzaba
el Guadalquivir mediante el puente de veinte arcos que pasaba por ventas de
Alcolea. Una vez superado el río y ya en la margen derecha del mismo, se unía a
la Vía Augusta.
Esta
calzada no comunicaba en sus orígenes Cástulo con Córdoba, sino que se dirigía más
hacía el Sur, dejando a un lado Córdoba para encaramarse hacía el Valle Medio
del Genil, siendo por aquel entonces Obulco, el auténtico centro y nudo de una
serie de comunicaciones anterior a la llegada de los romanos ya estaban recorridas por torres de
vigilancia que controlaban el territorio adyacente.
Con la
implantación del Imperio Romano, Córdoba es designada capital de Provincia, convirtiéndose
en el nudo de comunicaciones del Sur de la Bética y el Mediterráneo a través de
la Vía Augusta, y con la Meseta y el Norte de la Península por medio de las vías
que se dirigían a Gijón y Toledo.
De
esta manera la conocida vía de las torres de Aníbal, variaba su
itinerario, para adaptarse a las nuevas necesidades económicas y sociales donde
Obulco dejaba de tener un papel fundamental como centro de distribución y dando
ese papel a Córdoba.
A pesar
de tener un trazado tan favorable, este tramo que iba de Cástulo a Córduba por
Iliturgis, fue sustituido a finales del siglo I a.C. por la Alio itirine a Córduba
Castulonense conocida por la Vía Augusta.
LA VÍA EPORA-SACILIS
Aunque no
aparece citada por ninguna fuente escrita antigua, se tiene constancia de su
existencia por los restos arqueológicos documentados hasta el momento. Esta
calzada partía de Epora (Montoro), atravesaba Sierra Morena y el Valle de Los
Pedroches, para finalmente llegar a Solia (Cerro de Majadalaiglesia, El Guijo,
Córdoba,
El camino
entre estas dos poblaciones atravesaba numerosas explotaciones mineras por lo
que ha de suponerse que gran parte de la producción sería transportada a lomos
de animales de carga hasta el lugar donde se fundía y se transformaba el metal.
Desde
allí se transportaba a Córdoba a través de la Vía Augusta y una vez ya en la
capital de la provincia se embarcaba por el Guadalquivir hasta Gades, desde
allí a Roma. Pero esta vía no llegaba solo hasta Solía, sino que continuaba
hasta Santa Eufemia donde conectaba con dos
calzadas principales que franqueaban la meseta (calzada Córdoba-Sisapo/Miróbriga
y Córdoba-Toledo)
TRAMO OBULCO-CALPURNIANA
De este
recorrido tan solo se conserva algo de su infraestructura de la vía Heraclea en
unos 700 metros aproximadamente muy cerca del actual Bujalance. La importancia
de la misma durante el periodo de la República, queda comprobada al ser la vía
que facilitó la llegada de César y sus tropas en un tiempo récord desde Roma
hasta Munda, (Santa Cruz) tan solo 26 días gracias a eso César pudo acabar
finalmente con la resistencia pompeyana que duraba ya décadas.
CÓMO LLEGAR
Al salir
de Bujalance dirección Villa del Río (CO-292) nos cruzamos con la N. 306 (El
Carpio-Cañete de las Torres). En ese cruce según seguimos para Villa del Rio a
mano derecha inmediatamente está el acceso a los restos de la vía romana.
TRAMO SOBRE EL PUENTE ROMANO DE VILLA DEL RÍO
Se trata
de un puente romano de cinco ojos que cruza el arroyo Salado, y que hoy en día
sirve como límite entre las provincias de Córdoba y Jaén. Cuando se erigió a finales
del siglo I a.C. su importancia resultaba crucial, al ser parte del trazado de
la Vía Augusta, espina dorsal en las comunicaciones entre Roma y el extremo del
mundo Cádiz. Su realización en sillares de piedra, algunos de ellos
almohadillados o con relieve, le dan un aspecto de robustez que llama la atención
CÓMO LLEGAR
Desde el km. 347,200 de
la N- IV se puede acceder por un desvío a la derecha.
TRAMO EPORA-RÍO ARENOSO
Documentado
a poco más de dos kilómetros de Montoro, se encuentran aproximadamente dos kilómetros
de calzada romana, siendo sin lugar a dudas, el más espectacular y mejor
conservado de todos los tramos localizados en el ámbito de la Mancomunidad del
Alto Guadalquivir.
Realizados en “Clarea Strata” o guijarros de un tamaño medio
grande, deja el curso del río Guadalquivir
para ir adentrándose por el Valle de los Pedroches en Sierra Morena.
COMO LLEGAR
Desde Montoro coger la A- 2100 hasta el km. 12,300 antes de cruzar el
río Arenoso.
TRAMO RIO ARENOSO-CASILLAS DE VELASCO
De este
tramo se conservan unos cincuenta metros de pavimento de “glaria strata”,
mientras que el resto del recorrido que alcanza unos 1.400 m. es tan sólo el aterrazamiento
de la calzada.
Esta vía, aunque no está documentada en los textos de la época,
hubo de tener importancia crucial al ser la zona de acceso natural a la meseta
por el Valle de los Pedroches, además de transcurrir por ella el mineral (plata,
plomo y cobre) desde Sierra Morena hasta Montoro, donde se incorporaba a la Vía
Augusta.
CÓMO LLEGAR
Desde Montero coger la A-2100 hasta llegar a “Las Casillas de
Velasco, por el km. 9 aproximadamente.
TRAMO SOBRE EL PUENTE
ROMANO DE MONTORO
Este pequeño
puente de un ojo y estructura de sillares hace algunos años servía para superar
la vaguada del Arroyo de la Vega sobre la Vía Augusta, muy cerca ya de la
actual población de Pedro Abad, por
aquel entonces no existía ésta población pero muy cerca de allí se tiene la
certeza de que se encuentra Sacili Martialium, concretamente en las
inmediaciones de Cortijo del Alcurrucen.
CÓMO LLEGAR
Desde la CO- 401 dirección Alcurrucen el primer desvío a la derecha
pasando la autovía A-4.
TRAMO EPORA-CARDEÑA
Vía que atravesaba
Sierra Morena y llegaba al Valle de los Pedroches, zona minea por excelencia de
la Bética. Aunque en la actualidad está muy modificada al haberse convertido en
vía pecuaria desde época medieval, hay tramos donde se conserva su anchura
original, llegando ya a Baños del Arenosillo. La tipología de esta vía es “Glarea
Strata” con guijarros de tamaño medio grande.
CÓMO LLEGAR
Desde la carretera comarcal CP-106 los restos de la calzada se
ven mejor llegando a Baños del Arenosillo.
TRAMO CALPURNIANA-ACUEDUCTO CALPURNIANA
Este
pequeño tramo de vía, muy modificado en el siglo XIX, consiste en 400 metros de
calzada del tipo “Glarea Strata” que unen el límite oeste de la villa con el
acueducto que llevaba el agua hasta lo que hoy en día se conoce como Fuente del
Pilar. En la actualidad en casi toda su extensión, pudiéndose encontrar tan
sólo el pavimento del siglo XIX en la cuesta que se dirige hacia la fuente,
aproximadamente unos 50 metros.
CÓMO LLEGAR.
Desde la Ronda Sur de Bujalance al final de la calle
Pozanueva.
FUENTES CONSULTADAS : JUNTA DE ANDALUCÍA CONSEJERÍA DE TURISMO COMERCIO Y DEPORTES.