GRUPO DE SENDERISMO RAILES
Córdoba, 01 de octubre de 2020
AVENIDA DE LA LIBERTAD-PASEO DE CÓRDOBA-GLORIETA DE CHINALES-BARRIO DE FÁTIMA-AVDA. DE BLAS INFANTE-LA CAMPIÑUELA BAJA-VEREDA DE LA ALCAIDIA-VÍA PECUARIA-PUENTE DE LOS PICONEROS-ARROYO RABANALES-ARROYO Y CORTIJO DE NAVALAGRULLA-PUENTE SOBRE EL ARROYO LINARES-EL CARDADOR SIERRA-LAS CANTERAS DE ASLAND-MIRABUENO-CHINALES-SANTA ROSA-PASOS 33.649.
SENDERISTAS.-Avrelivs-Félix-A. Espejo y
Agustín López.
Para realizar la marcha de hoy habíamos concretado hacerlo a través de la conocida Campiñuela y continuidad hacía la Vereda de la Alcaidia mediante el consiguiente y previo desvío hacía la el Cortijo de Navalagrulla y posterior dirección al Santuario Virgen de Linares, pero sin necesidad de llegar a este. La salida había sido prevista a las 7,30 h. desde la puerta del Hotel Center.
De modo que cuando las agujas del reloj marcaron oportunamente la hora prevista emprendimos la marcha los cuatro caminantes a través del larguísimo paseo llamado de Córdoba, que con razón o sin ella le solemos apodar del “Colesterol”, aquí en este paseo es una constante la de ir y de venir de personas, unos andando y otros corriendo para rebajar la barriga cervecera, la glucosa y otras cosas, dicho sea de paso este paseo tiene cerca de dos kilómetros de longitud.
Una vez
finalizada la marcha por este paseo enderezamos el rumbo a través de la Joroba
que siempre le hemos llamado de Asland, así como por las inmediaciones y proximidades
fábrica de cementos, luego nos desviamos hacía el
Barrio de Fátima y la Avenida de Blas Infante, donde conectamos con la Vereda de la Alcaidía, lugar este
por donde ya hacia su aparición el disco
solar por el Este, con tanta fuerza, que nos hacía presagiar que íbamos a tener un buen día, no tardamos mucho en ver la presencia al paso del tren hacía la Universidad de Rabanales y oír algún que otro rugido del dinámico tren AVE.
Llegó el momento de abandonar terrenos urbanos para seguir caminando por esta Vereda de la Alcaidía que a jurar por su traza de piedra suelta y algún que otro molesto empedrado para los pies nos hace pensar que en sus mejores tiempos debió ser algún camino carretero, hasta es posible que fuera una antigua vía romana, la famosa vía Augusta que procedía de Gades no debió quedar muy alejada de esta vereda o camino.
Puente de Los Piconeros
Más adelante
pasamos junto a las proximidades del Canal Guadalmellato y el desvío que
conduce al Lago Azul, asimismo junto a esa especie de adefesio que le han
colocado al antiguo Puente de Los Piconeros para impedir el acceso peatonal al mismo,
esa joyita del pasado por su antigüedad y belleza bien merece otra cosita
que no estar ahí oculta y tapada entre ramajes, es evidente
que al menos así está exento del vandalismo callejero, hay antecedentes de aquello que ocurrió con el Puente
de los Nogales, lo destrozaron para llevárselo por piezas a alguna particular parcela o finca, menos mal que llegaron a tiempo de salvarlo de la hecatombe.
Abundan por
algunos de estos lugares bastantes
hectáreas de plantaciones de jóvenes
olivos conocidos como de producción super intensiva cuyo verdor contrasta con
la sequedad del terreno.
Caminando por
estos lugares una vez más hemos podido echar en falta la presencia de vacas,
toros y bueyes que con tanta abundancia
hemos podido ver otras veces, ya no es de recibo poder decir aquello de “estar preparados, coger los capotes de
torear, por si las moscas ”
Ya llevábamos
dos horas de marcha andante cuando nos detuvimos en el desvío protegido por una
cancela metálica que permite caminar con dirección al Cortijo de Navalagrulla,
allí tomamos el refrigerio, sí el famoso
y energético platanito canario, asimismo se hicieron alguna que otra foto que
aquí se adjuntan como se puede.
Una vez
finalizado el escueto desayuno para devorar un potásico plátano abrimos la cancela y en marcha nuevamente a través
de estas veredas que no tienen nombre pero que nos entendemos llamándole de
“Linares” por ella fuimos subiendo y bajando cerretes y cerrillos de no mucha
altura que nada le impidieron a Félix el de las Trochas para darle un repaso a
las esparragueras que ya verdeaban, no obstante el terreno está seco por
falta de lluvias, todavía no ha dado tiempo
a que ni los nízcalos ni los espárragos vayan creciendo, pero si algunas florecillas silvestres que consultado con el amigo
Herminio Pérez por teléfono ya que es especialista en botánica, nos dijo llamarse Azafrán
Silvestre que suele nacer a principios
de otoño.
En nuestra marcha cruzamos al menos tres secos lechos de algunos arroyos que al parecer se llaman uno de la Lancha y Navalagrulla el otro, dejando el Cortijo en explotación agraria de este nombre a la izquierda de nuestra marcha con su clásica alberca llena de agua. En aquellos ascendentes y solitarios parajes llaman la atención al caminante, una carrocería en estado de abandono correspondiente a un antiguo y destartalado coche que, en sus mejores tiempos le llamábamos "Cuatro Latas".
Este el día
que lo quiten del medio de aquellos montes lo vamos a echar de menos ya que dado los años que allí lleva
en aquel lugar ya viene a formar parte de aquel singular paisaje.
Sendero cubierto de verdes lentiscos
Más adelante
y tras cruzar una larga y zigzagueante vereda cubierta de verdes lentiscos nos
aparcería el solitario y amarillo cartelito indicando que por este solitario paraje pasa el gasoducto de Enagás,
Córdoba-Badajoz.
Ya bajando
hacia las proximidades del Santuario de Virgen de Linares nos encontramos con
dos peregrinos en el Camino Mozárabe de Santiago, eran belgas pero que
hablaban con mucha desenvoltura nuestro idioma, iban a Santiago de Compostela, hoy hacían la etapa Córdoba-Cerro
Muriano; estos habían iniciado el camino en Almería de modo que casi le quedaban un mes de peregrinación.
El
restaurante Cardador Sierra los dejamos a la izquierda de nuestra
marcha y a través de los senderos y senderillos donde abundan los
lentiscos y proliferan las piedras vinimos a salir frente a la urbanización
Paraíso Arenal y el Arco de Triunfo que precede a esta barriada.
Cruzamos el
paso inferior carretera Granada-Badajoz y la zona donde las palas mecánicas extraen materiales para la fabricación de cementos, igualmente oímos un extraño ruido, miramos a un lado y eran las
cintas aéreas transportadoras que transportaban este tipo de materiales, desde
allí arriba ya se veía la ciudad pero había que llegar a ella.
Por estos lugares tuvimos la
idea de ir hacía las canteras de Asland, por allí cruzamos verdaderos barrancos y el seco lecho del
arroyo Pedroche hasta subir hacía la barriada de Mirabueno, luego a la de Chinales, y después a la de Santa Rosa, al final más de uno dijo "HECHO", como queriendo decir por aquí subiendo ya no volveré jamás.
Ya en la
Avenida de los Almogávares dimos vista en
la acera de enfrente a Rafael Jiménez
Luque y a Pedro Luque Jiménez, iban bien
encaminados, no nos llegamos a parar con
por ellos porque ya esperaba la visita del yerno de Pedro, para la instalación de un
programa en el ordenador.
A las 13,30 h. dimos por finalizada la marcha de hoy en la Avenida del Brillante con seis horas de marcha y muchos kilómetros en la mochila.
¡¡¡HASTA LA
PRÓXIMA!!!
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