domingo, 19 de marzo de 2017

LA BATALLA DE LOS ALPORCHONES



Día 17 de marzo de 2017-    

EFEMERIDES BATALLA DE LOS ALPORCHONES
                                             
                                                  Día 17 de marzo de 1452


Al llegar los moros granadinos al Puntarrón en sus correrías y algaradas  que es el extremo oriental de la sierra que separa el campo de Lorca de la marina, hicieron prisionero a un caballero lorquino llamado Quiñonero este había salido a descubrir y conforme al plan que se habían propuesto marcharon dejando a su izquierda la sierra a un kilómetro de distancia de su falda, y a unos diez de la ciudad lorquina: ya habían sido descubiertos los enemigos y dado aviso a través de las atalayas y torres vigías al cuartel general saliendo al momento de Lorca el ejército cristiano para enfrentarse con los granadinos en el sitio llamado los ALPORCHONES, casi en las faldas de las colinas  que forman lo que se llama Rincón de Aguaderas, terreno llano sin  otros accidentes geográficos  que las erosiones producidas por las aguas eventuales de la rambla de Viznaga.

   Los peones moros trataron de impedir el paso  por la rambla mientras la caballería esperaba al otro lado en terreno adecuado para operar y atacar, con tal ímpetu acometieron los cristianos que, fue arrollada la infantería mora pero Malik-alabez y el alcaide de Guadix embistieron con tanta bravura y denuedo que a los cristianos les hicieron retroceder, si bien el valiente Fajardo, el Comendador Lisón, Garci-Manrique y D. Diego Ribera no los hubieran detenido alanceando a los moros que cargaban sobre ellos, entre los primeros que murieron fue Aben-hariz alcaide de Baza, muerto en la lucha personal con el Comendador Lisón, de una y otra parte se hacían prodigios de valor, pues entre los moros estaban los más valientes capitanes, y con los de Lorca peleaban los Moratas, García de Paredes, Quiñonero, García de Alcaraz y otros bravos; dos veces fue rota la caballería mora y dos veces se rehízo por el valor de Malik-alabez, cuyo brazo hacia gran daño en los cristianos.


Fajardo que comprendió que el alma de la batalla era este alcaide, arremetió hacía él con su lanza y a no haber sido la cota de Alabez de tan buen temple, allí hubiera muerto, pues se quebró en ella la lanza; Malik-alabez tiró con su alfanje un valiente tajo a la cabeza de Fajardo que éste tuvo la fortuna de evitar y de esquivarlo, sujetando  al moro con gran fuerza hasta que llegaron más peones que lo maniataron y lo sacaron de la batalla por orden de Fajardo.

Muertos casi todos los alcaides y prisionero Alabez, empezó a decaer el ánimo de los moros, en vano Abdelbar como león enfurecido, corría de una parte a otra- ¿qué aguardas?, le dijeron unos soldados suyos, ya no queda ningún capitán  nuestro, y con unos pocos caballos que le siguieron retrocedieron por el Rincón de Aguaderas y atravesando la sierra llegó por la marina a Vera; el ejercito moro se declaró en derrota  le siguieron los cristianos hasta La Fuente de  Pulpí; solo llegaron a Granada unos trescientos  siendo día de  luto para aquella ciudad nazarí no compensando con la cruel orden del rey Muhamad que había ordenado mandar la expedición. (Así consta en la carta que Alonso Fajardo escribió al rey Juan II de Castilla).


El Concejo de Murcia, en acción de gracias por tan feliz éxito acordó declarar patrón de Murcia y su reino al apóstol  San Patricio de Irlanda cuya festividad celebraba aquel día la iglesia. Tambien se acordó erigirle un templo, voto que cumplió después transformando el pequeño de San Jorge  en un grandioso y monumental, obra  del ilustre lorquino D. José Clavijo, cuyo hidalgo proceder en el asalto de Roma, premió la Santidad de Clemente VII concediéndole el título de Colegiata insigne.


       Relato de D. Francisco Cánovas y Cobero  en su Historia de la Ciudad de Lorca  nos indica que poco empaña el brillo de esta victoria el hecho que Malik-alabez prisionero de guerra por Fajardo, fuera conducido a la morada de este, pero al quererlo entrar por una puerta del huerto, dijo el altivo moro, “no soy hombre de baja suerte para entrar por ahí, soy de los primeros caballeros y alcaides de Granada y capitán de frontera y debo entrar por la puerta principal., tanto se resistió a entrar que allí muerte le dieron, acción indigna y villana que dada la hidalguía de Fajardo no es creíble que este lo autorizara.


Estaba esta casa donde el palacio  al lado de la casa de Juan de Guevara siendo la que es hoy la señalada con el número 7 de la calle de la Corredera.  
               
                                                               


1 comentario:

  1. Buenas. Me gustaría saber si se conoce el sitio exacto de esta batalla de Los Alporchones, pues tengo una finca en Aguaderas y me gustaría poder visitar la zona. Gracias.

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