AÑO 1438 GRANADA Y SU GENTE DE REALENGO
Una serie de pueblos y ciudades granadinas, entre las que se encuentran: Vélez Blanco y Vélez Rubio, que ven ya próxima su conquista por Castilla, se ponen bajo la protección de rey castellano, para no caer dentro de la jurisdicción de los señores feudales.
Esta maniobra, tendente a convertir estas ciudades en villas realengo, busca poder disfrutar de las ventajas que el realengo ofrece, frente a las desventajas que representa la sumisión a un gran señor feudal.
Las
tierras o ciudades de realengo son aquellos territorios que sólo están
sometidos al rey, y están administrados por funcionarios reales.
Estos
territorios no sufren los temidos tributos señoriales y gozan por tanto una mayor
libertad.
Los
campesinos de realengo, así como los villanos, están exentos de una serie de
cargas, y aunque se considera que sus propiedades pertenecen al rey, en la práctica
pueden disponer de sus tierras.
En las
ciudades, el realengo da un especial estatuto jurídico, que permite a la villa
o ciudad estar presente en la cortes y participar, en cierto modo en las
decisiones del poder.
Todas
estas ventajas constituyen un poderoso aliciente para atraer a las ciudades
castellanas, aun antes de ser reconquistadas,
La
posibilidad de sustraerse al yugo señorial, es capaz de mover a las ciudades
granadinas a ponerse bajo la protección de la corona.
Los señores
feudales eran nobles que poseían feudos territoriales, que incluían tierras,
castillos, y personas, era un grupo social privilegiado que gobernó Europa
entre los siglos IXC y XV y en algunas regiones hasta el siglo XVIII, el señor
soberano tenía sus tierras labradas, recaudaba impuestos y contaba con sus
vasallos que tenían la obligación de prestar asistencia militar si eran
convocados por su señor. Con el paso del tiempo el feudalismo fue deteriorándose
y dejando paso a nuevos sistemas con ciudades cada vez más pobladas surgiendo
una clase social que no se conformaba con el sistema feudad y así nació la
burguesía.
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